Los médicos usan el término epistaxis para referirse a las populares hemorragias nasales, que más de un susto dan a los niños, a sus padres y maestros.
Se debe parar la hemorragia con mantener la nariz presionada con los dedos sobre su punta nasal.
Producto de un golpe o por razones aparentemente desconocidas, causan alarma, pues ver sangre en el rostro de una persona, sobre todo la de un niño, es motivo de preocupación.
Expertos comentan que la zona más visible del cuerpo es la cara y en su prominencia más notable la nariz. Es imposible ocultarla y cuando sangra se encienden las alarmas de emergencia.
De acuerdo con médicos,la mayoría de las hemorragias nasales parecen peores de lo que son en realidad.
En otras palabras, dicen, las epistaxis, son aparatosas, molestas y, a veces, pueden asustar, pero no suelen ser un problema grave.
Diferentes sangrados
Los especialistas explican que hay dos tipos de hemorragias nasales: Las anteriores y las posteriores.
Las primeras son las que se producen en la parte anterior a la nariz, junto a las fosas nasales y son muy comunes en niños y adolescentes. Se produce el sangrado porque existe abundancia de vasos sanguíneos capilares y por ello, es más fácil detenerla.
Las posteriores, comentan, son las que se producen en la parte interior de la nariz. Las personas adultas son más susceptibles a padecerlas y son difíciles de detener.
Sobre las causas que provocan el sangrado nasal, indican que son muchas, entre ellas hay ambientales como la temperatura demasiado seca o cambios de presión atmosférica, fractura craneal, enfermedades corporales o ciertos medicamentos.
Tapón de emergencia
Para detener rápidamente una hemorragia hay que colocar un taponamiento de algodón en la fosa nasal sangrante. Este dique debe ser del tamaño de la mitad del dedo meñique, de preferencia humedecido con agua fría.
La gente que auxilie a la víctima de la hemorragia debe mantener la nariz presionada con los dedos sobre su punta nasal por lo menos durante 20 minutos.
Es útil también aplicarse compresas frías o hielo en la frente del afectado.
Pero, los especialistas dicen que no es suficiente con saber cómo detener una hemorragia nasal, sino conocer cómo evitarla.
Los otorrinolaringólogos señalan que nadie debe picarse ó rascarse el interior de las fosas nasales, ni tratar de introducirse ningún objeto extraño: Ni su dedo, pañuelos o cotonetes.
Igualmente, afirman, es importante evitar sonarse fuerte la nariz, asolearse o acalorarse, sobre todo si se reconoce la tendencia o fragilidad de esa área para sangrar.
Hay que evitar golpes en la nariz, ya que por simple que parezca, si es una persona es delicada le puede sangrar con un leve contacto.
Si el sangrado persiste con frecuencia, no lo piense, visite a un médico especialista en otorrinolaringología.
Fuente:guiainfantil