El primer año de vida de los niños es la etapa en la que están más expuestos a caídas, machucones y demás.
La caída de los caminadores es uno de los accidentes más comunes de los niños menores de un año de edad. Según los especialistas, se dan porque los padres no se percatan de que sus hijos, a esta edad, están en la etapa más productiva de su desarrollo y conocimiento.
Ellos empiezan a avanzar rápidamente en su desarrollo: a los 5 meses, aproximadamente, se sientan. A los 7 meses comienzan a gatear y a los 11 dan sus primeros pasos. Son etapas donde empiezan a ver el mundo desde otro punto.
Así que es el momento de prestarles más atención. Ellos ya quieren llevarse todo a su boca, probarlo, tocarlo, sentirlo. No conocen el riesgo y están entrando a la etapa del experimento, donde todo lo nuevo es atractivo y llevará a los menores de un año a ser más vulnerables a cualquier tipo de accidente. Es por esto que los padres deben evitar dejarlos solos y seguir algunas recomendaciones dadas por especialistas, que ayudarán a prevenir accidentes.
Para ello, es importante conocer las habilidades del niño (ver recuadro Guía de desarrollo), según la edad; esto permitirá que usted se percate y esté más atento a ese pequeño que se está arriesgando a conocer el mundo con sus manos y pies.
Los más comunes
Según las cifras más recientes de la Secretaría de Salud de Bogotá, en el año 2009 se presentaron 23 accidentes caseros en niños menores de 12 meses. Sin embargo, es en los pequeños de 1 a 4 años que más accidentes se registran: 648 acudieron al servicio de urgencias por lesiones en casa.
Dentro de los más comunes, entre los 6 y los 12 meses, la pediatra Ángela Elisa Camacho afirma que son los que ocurren en el baño, la cocina y las escaleras, lugares en los cuales no deberían tener acceso sino bajo condiciones de supervisión total.
“También son frecuentes las caídas de alturas (cama, silla de comer, bañera), quemaduras por objetos calientes (halan los manteles y las manijas de las ollas), ingesta de objetos y cuerpos extraños (dulces, monedas, maní)”, explica la especialista.
Además, están las caídas en el caminador, elemento prohibido en algunos países, porque los padres creen falsamente en la seguridad de este implemento y no supervisan al niño, quien puede caer por escaleras, alturas y tener acceso a lugares de riesgo, como el baño y la cocina.
Entre tanto, Vladimir Muñoz, médico pediatra del Hospital de Kennedy, agrega que otros de los más
comunes son los machucones, las cortadas y las lesiones de punta de dedo.
Tenga en cuenta
• Al bañar a los niños se debe tener todo al alcance de la mano (5 cc son suficientes para ahogar a un lactante menor).
• La falsa creencia de que el niño no se voltea causa un accidente la primera vez que el niño hace un rodado y cae de la cama.
• Los objetos pequeños comestibles y didácticos deben estar fuera del alcance de los niños.
• Tenga siempre las tapas para los enchufes, las rejas, puertas escaleras y bordes para las esquinas de las mesas.
• Evite las ventanas abiertas.
• Cuando el niño inicia el gateo, los adultos deben gatear primero en la zona donde lo hará el niño, para identificar el posible contacto del niño con elementos que no se puedan apreciar desde la altura.
• Nunca debe haber niños cuidando niños.
• El tiempo de un parpadeo es suficiente para tener accidentes.
Importante
• No tenga en casa jarrones pesados ni objetos cortantes.
• No permita que su hijo ingrese a la cocina.
• Tenga siempre pisos antideslizantes.
• Supervise las fuentes de gas natural. Siempre deben estar bien cerradas.
• Tenga cuidado al bañarlo y no deje agua caliente al lado de ellos.
• Nunca deje al niño al lado de ventanas disponibles al acceso de ellos.
• Tenga en su casa un pequeño botiquín que incluya alcohol, agua oxigenada, gasas, medicinas para bajar la fiebre, sales de rehidratación oral, algodón y tijeras.
Fuente:guiainfantil
